Shhh...Mi corazón suspira por ti.Susurra bellas palabras al oído a mi mente, palabras de amor, palabras poderosas...Ay, dulce y apasionado corazón, estas enloqueciendo mi pensamiento, confundiéndolo, perturbándolo...Mi mente desearía no poder escucharte, desearía poder taparse los oídos, y seguir pensando racionalmente...Pero ya no puede más, le has susurrado hermosas palabras, y ella también ha caído.Y todo por culpa de él.Él ha llenado tu cabeza de mariposas, de recuerdos, de dulces momentos tal vez ya olvidados...Querido corazón, has hecho que vuelvan a mi todo lo que vivimos, lo has hecho renacer de sus cenizas, y ahora los recuerdos se alzan, se encabritan y no me dejan en paz.Shhh...
Son las 4:00 de la mañana en mi reloj.Despierto de un extraño sueño.Lo primero que noto es que me duelen los pies a horrores (maldigo a los que inventaron los tacones), en realidad me duele todo el cuerpo, pero nada es tan malo como el constante pitido en mis oídos.Una canción suena en mi cabeza, desearía poder silenciarla, pero no puedo.Un minuto más tarde, llega tu recuerdo.Y me acosa, no me deja dormir, veo en tus ojos y en tus negras pupilas mi propio reflejo, cierro los ojos, me tapo con la almohada...la canción sigue sonando y no puedo pararla.¿Qué haré ahora? Ya me tienes entre tus redes, has pescado al pececillo de colores...Una lágrima se desliza, silenciosa, por mi mejilla.Me maldigo por ser tan estúpida...Lo único que quiero ahora se entrelazar mi mano con la tuya, para no poder separarme de ti nunca más.
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